martes, 22 de noviembre de 2011

Los ticos: ¿hipercríticos o incongruentes?

Frecuentemente los medios de comunicación destacan resultados de encuestas y otros estudios que alimentan el ego nacional. Por ejemplo, que somos el país más feliz del mundo. No le dan igual divulgación a otros resultados que ponen en entredicho algunos de los lugares comunes que se repiten sin la menor pizca de crítica, o a las incongruencias entre respuestas.

La Corporación Latinobarómetro ha venido realizando encuestas anuales en 18 países de América Latina, entre ellos Costa Rica, que suministran importante información política, con las limitaciones, por supuesto, que tienen estos estudios. Se miden opiniones y percepciones, y se parte del supuesto de que todas las personas que se entrevistan tienen información sobre lo que se pregunta, lo cual no siempre es cierto. Con ese cuidado veamos algunos de los resultados sobre nuestro país.

Lo primero que llama la atención es la desaprobación a la gestión de los gobiernos, entre los años 2000 y 2011. Aproximadamente la mitad de las personas entrevistadas desaprueba la gestión de los presidentes y presidenta, salvo en 2003 y 2005, cuando ese porcentaje se vino abajo (37 y 32 por ciento respectivamente), y en 2009, cuando la evaluación fue muy alta: 75 por ciento.

El apoyo a la democracia como forma de gobierno se ha mantenido oscilante desde el 2000, con una tendencia a la disminución que se agudiza en el último año: disminuye 7 puntos porcentuales entre 2010 y 2011, situándose en el 65%. Pero el nivel de satisfacción con la democracia real del país es mucho más bajo: 44%. Además, a las personas entrevistadas se les pidió calificar la democracia de Costa Rica en una escala de 1 a 10. El promedio de las calificaciones resulto ser 7,5. Es decir, que pasamos raspando.

Un poco más de la mitad de los ticos, aproximadamente, considera que a esta democracia le falta reducir los niveles de corrupción, y a una tercera parte le parece que le falta garantizar la justicia social, aumentar la transparencia del Estado y la participación ciudadana. Solamente un 11% considera que está bien como está. Por otra parte, la confianza en la Asamblea Legislativa es muy baja (27%), lo mismo sucede con el Poder Judicial (34%), y los partidos políticos apenas alcanzan un 19%.

En cuanto a distribución del ingreso, solo el 24% considera que es justa y muy justa. En concordancia con esa respuesta, únicamente el 18% considera que el gobierno actúa para el bien de todo el pueblo, con una caída espectacular de 13 puntos con relación a la medición de 2010. Además, la mayoría de las personas considera que el país está estancado (82%).

En medio de estos descontentos, ¿cómo entender que la mayoría de los entrevistados dice estar satisfecha con la vida (88%)? ¿Hipercríticos, incongruentes, o fallas en la medición? ¡Vaya usted a saber!

No hay comentarios:

Publicar un comentario