martes, 3 de noviembre de 2009

Piedras en el zapato

Sobre la caída del puente, que arrojó dolor y luto, se ha dicho ya mucho, aunque faltan los resultados de la investigación para sentar responsabilidades, que supuestamente se está realizando. Independientemente de la labor que efectuara –no tengo criterios para evaluar su trabajo--, la renuncia de la Ministra González se imponía: se le había acabado el espacio político. Quedarse en el cargo hubiera sido suicida para ella y la habría convertido en una incómoda piedra en el zapato para el gobierno y para la candidata Chinchilla. Un blanco perfecto para venenosos dardos políticos, en plena campaña electoral.

No sé si recibió presiones de autoridades políticas para que renunciara, porque el Presidente Arias parecía estar dispuesto a mantenerla en el cargo. Pero en el documento de renuncia dijo que: “…hoy lo que priva es el dolor de muchos y el interés político de unos pocos, pero en puestos claves” (el subrayado es mío) Como no aclaró el significado de la segunda parte de la frase, necesariamente se presta para conjeturas. ¿Quiénes son esos pocos y en puestos clave?

En la segunda parte de ese documento, cuando señaló aspectos en los que no había fallado el Ministerio a su cargo, comenzó diciendo lo siguiente: “No les fallamos a los cientos de miles de turistas que en Alajuela o en Liberia, entrarán al país en un aeropuerto de categoría mundial fomentando una gran primera impresión, que redundará en más trabajo para hoteles, productores, vendedores y comunidades.” ¡Qué desafortunado inicio! Se les falló a comunidades necesitadas de puentes y carreteras, pero no a los turistas. Cuestión de prioridades, al menos en la redacción del comunicado.

Pero el mundo está al revés. Mientras unos pierden la vida, porque se cae un puente en mal estado, y una comunidad queda dolida y aislada, otros usan el transporte del Estado para fines personales y partidistas. ¿Es que hay ciudadanías de primera, segunda y tercera categoría?

Otro asunto a aclarar y en el menor tiempo posible. Y otra piedra en el zapato para el PLN y su candidata; pero una oportunidad para mostrar firmeza y honestidad. Sin embargo, de primera entrada la fracción del PLN manejó mal el asunto. Colmaron de elogios a su compañera de bancada y la declararon inocente de cualquier cargo, sin que mediara investigación alguna. Hasta la presidenta del Tribunal de Ética adelantó criterio y se descalificó. ¡Que confusión entre amistad, partidismo e interés público! Ojalá no salgan con aquello de “vicios privados virtudes públicas”.

También una piedra en el zapato para el Tribunal Supremo de Elecciones; pero una oportunidad para mostrar independencia de criterio y firmeza a inicios de un proceso electoral. Por esa razón no debe darle largas al asunto ni salir con medias tintas. Cometería un grave error si asume una actitud complaciente al inicio de la campaña y estrenando Código. Las señoras y los señores magistrados deben recordar que hay ojos críticos pendientes de su labor.

1 comentario:

  1. Y cada día crece más el número de ojos críticos que observa con detenimiento al TSE...
    Esta tragedia del puente la utilicé como metáfora, en mi clase de Salud Comunitaria, para evaluar la función del Estado y entender la dimensión de sus responsabilidades indelegables...Es difícil pero indispensable que las nuevas generaciones se apropien del concepto de ciudadanía y exijan, sin temor, a cada quien lo que corresponde, incluyéndose a ellxs mismxs...Según Oscar Arias, el problema ahora es "la criticadera"...¿Cómo es posible que un Premio Nobel de la Paz reduzca a un descalificativo comó ése el concepto de ciudadanía activa y de emancipación (no uso la palabra empoderamiento)? ¡¿Pero qué significa eso?! ¿Que todo iría mucho mejor si nos comportáramos como un rebaño manso de ovejas que caminan "hacia adelante" donde las espera el matadero?

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