Durante
las vacaciones de fin de año estuve leyendo una entretenida y reveladora novela
del periodista y escritor mexicano, Jorge Zepeda Patterson, que ganó el Premio
Planeta en 2014. Reveladora porque, como en su momento lo hizo Roberto Saviano
con Gomorra, nos acerca a una realidad que ignoramos o preferimos ignorar. A un
submundo cuya dinámica influye y altera el funcionamiento "normal" de
la economía y de la política: el de la trata de personas, el del narcotráfico,
el de los negocios ilícitos, etc. Un submundo donde las fronteras entre la
legalidad y la ilegalidad se vuelven viscosas y desaparecen.
En
un pasaje de la novela, uno de los oscuros personajes dice lo siguiente: “Los
verdaderos amos del universo no son los jefes de Estado y ni siquiera los
empresarios de la lista de Forbes: son los operadores de los grandes
fondos de inversión y los brokers
que se mueven en las fronteras elásticas de la legalidad. Son ellos los que
ocasionan que Perú aumente su PIB porque un mineral adquiere una cotización récord
o que Grecia pueda respirar otros seis meses a cambio de entregar a los
mercados financieros alguna isla o una empresa paraestatal.”
Una
afirmación que no hay forma de corroborar con encuestas y otros instrumentos
con los cuales las ciencias sociales pretenden legitimarse como tales, y que
solamente un escritor puede darse el lujo de ponerla en blanco y negro sin que
lo acusen de exageración, imprecisión o falta de rigurosidad académica. Para
una cierta ciencia social lo que no puede medirse no existe, y este submundo no
puede ciertamente medirse, pero existe. Está ahí, influyendo directa o
indirectamente en nuestras vidas aunque intentemos disminuir su importancia o
ignorarlo.
Zepeda
Patterson además de periodista y escritor, es analista político y economista.
Novela entonces una realidad que conoce bien y que algunos señalan como un caso
extremo de maridaje entre poderes legales e ilegales, que ha seccionado la
debilitada institucionalidad del país, dejando a buena parte de la ciudadanía
en condiciones de indefensión en muchas zonas, como el extenso norte. ¿Pero
solamente México se encuentra en tal situación o de alguna manera la historia
se repite en la mayoría de los países de la región?
Difícil
saber la situación de Costa Rica en esos aspectos, pero es necesario empezar de
alguna manera a tomarlo en cuenta en nuestros análisis. A lo mejor ciertos
inexplicables acontecimientos políticos y económicos podrían empezar a
clarificarse. Al fin y al cabo la pretensión de la ciencia social es poner en
duda la ilusión de transparencia que proyecta el acontecer social.
En
fin, que recomiendo la lectura de "Milena o el fémur más bello del
mundo", de Jorge Zepeda Patterson. No se van a arrepentir, sobre todo si
lo hacen pensando que no se trata solamente de una invención sino de una trama que revela partes
de una realidad sumergida, que no puede explorarse a fondo sin arriesgar el
pellejo.
lo social viscoso persiste en existir prescindiendo de las legitimidades...
ResponderEliminarsupera la imaginación, incluso, el realismo mágico de Aracataca
Cuál es el origen histórico de las Ciencias Sociales? Los Pueblos Originarios tienen un remedo de eso?